🏥 España presume de tener uno de los mejores sistemas sanitarios del mundo. Y, en términos de formación, es cierto: médicos, enfermeros, técnicos y personal de atención primaria están entre los mejor preparados de Europa. Pero la realidad laboral de estos profesionales es otra cosa. Es precaria. Es desmotivadora. Es inaceptable.
📉 Formarse para emigrar
Según datos del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos, en 2023 más de 4.000 médicos solicitaron el certificado de idoneidad para trabajar en el extranjero, lo que supone un aumento del 20% respecto a 2022. Desde 2010, más de 33.000 profesionales sanitarios han pedido estos certificados para irse a trabajar fuera de España. ¿Por qué?
Porque fuera les ofrecen lo que aquí no: estabilidad, mejores sueldos y respeto profesional. Un médico residente que termina su formación puede ganar entre 2.500€ y 4.000€ al mes en Alemania, Reino Unido o Francia. En España, muchos empiezan encadenando contratos de días o semanas por 1.300€ netos mensuales.
🤦♂️ ¿Y qué aprendimos tras la pandemia?
Durante el COVID-19, los aplausos en los balcones y las promesas institucionales llenaron titulares. Se habló de “reforzar la sanidad”, de “blindar lo público”, de “dignificar a los profesionales”. Hoy, en 2025, todo eso quedó en nada.
Los contratos por semanas o días siguen siendo la norma. En algunos hospitales y centros de salud, los contratos de sustitución se firman el viernes por la tarde para no pagar todo el fin de semana, o se espera a última hora para justificar que “no hay sustitutos”.
🔒 Cierre de camas y abandono planificado
Cada verano, cientos de camas hospitalarias se cierran por falta de personal, no porque falten enfermeros o médicos dispuestos a trabajar, sino porque no se les contrata a tiempo o se ofrecen condiciones indignas. En algunas comunidades como Madrid, Andalucía o Valencia, se ha llegado a cerrar hasta el 20% de las camas en hospitales públicos durante periodos vacacionales.
Este deterioro no es casualidad: responde a una política de externalización, infradotación presupuestaria y gestión ineficiente, que crea un entorno donde lo privado florece a costa del hundimiento de lo público.
🚨 Deterioro asistencial: el síntoma final
- Citas en atención primaria a 12 o 15 días vista.
- Urgencias colapsadas por falta de refuerzo de plantilla.
- Pacientes crónicos sin seguimiento regular.
- Profesionales agotados, rotando por varios centros, sin tiempo ni condiciones para cuidar bien.
Lo peor es que todo esto empuja a la ciudadanía a soluciones de pago: seguros privados, clínicas concertadas, renuncia silenciosa al sistema público.
🧑⚕️ Sin condiciones dignas, no hay sanidad digna
No hay sanidad sin profesionales. Y no hay profesionales sin contratos estables, salarios justos y respeto laboral. La situación actual no es culpa de los médicos ni enfermeros que se van: es culpa de un sistema político que no ha estado a la altura. Ni antes, ni durante, ni después de la pandemia.
Aplaudir no basta. Hay que pagarles dignamente. Hay que darles estabilidad. Y sobre todo, hay que dejar de mentir diciendo que “no hay médicos”. Sí los hay. Solo que no están dispuestos a seguir siendo maltratados.
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